De igual a igual

¿Nos gustaría que nuestros hijos dependiesen siempre de nosotros? ¿No sería bueno para ellos y también para nosotros el que aprendiesen cuanto antes a tomar las riendas de su vida? Yo creo que si. Pero eso no significa que no se les quiera o que desees que se vayan cuanto antes. Simplemente se trata de darles las herramientas para que puedan ser más útiles para ellos mismos y para los demás. Para que aprendan a buscarse la vida de la mejor manera posible. Eso implica facilitarles las herramientas para que sean capaces de conocerse lo mejor posible y para que aprendan cuanto antes lo necesario para desenvolverse.

Pues bien, este rollo paternal que reconozco que todavía me coge joven, pretendo trasladarlo al ámbito empresarial.

Si la empresa paternal hace años que desapareció, ¿porque muchos profesionales siguen pensando como hijos desvalidos? Está claro que la relación profesional desgraciadamente se está convirtiendo en una simple transacción económica. Salario por servicios. Creo y estoy trabajando para que eso cambie y se puedan establecer otro tipo de vínculos menos «monetarios» y más emocionales. Mientras tanto, ¿no será mejor que los profesionales sean conscientes de que trabajan por un servicio y que su futuro está ligado a la calidad de ese servicio y a la satisfacción de las necesidades de su empresa?


¡Despierta!, el contrato psicológico ha acabado y será mejor para todos tenerlo claro cuanto antes. En la empresa no siempre vas a tener la sopita caliente esperando como hacía tu mamá.

Estoy convencido de que las empresas también demandan una situación en esta linea. Por ello creo que deben ser las primeras en dar a sus empleados todas las herramientas para que piensen por si mismos, aprendan a tomar decisiones y a controlar su carrera. Aunque algunos se vayan de casa, al menos pensarán que en esa empresa tienen siempre un hogar. ¿o no?





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