Química Recreativa XVI: Efecto tunel o no hay atajos en la Marca Personal

Había algunos temas de la carrera de química que rozaban el terreno de la magia. Asignaturas en las que nos hablaban de fenómenos casi paranormales.

Nos hablaban de experimentos con gatos que podían morir si abrías una caja.
Nos decían que había partículas que tambien eran ondas.
Nos explicaban que no era posible conocer simultaneamente la posición y la velocidad de una partícula.

Y también nos decían que no era imposible que nuestra partícula llegase al otro lado de una barrera atravesándola en lugar de saltándola.
A aquello tan extraño lo llamaban El efecto túnel

Se trata de un efecto mecanocuántico que consiste en que una partícula pueda atravesar una barrera de potencial sin tener energía suficiente para rebasarla por encima (en el sentido clásico), debido a que la probabilidad de que la partícula se encuentre al otro lado de la barrera es no nula.


Dicho de otra manera, es la capacidad que tienen las partículas subatómicas como los electrones para pasar, en ciertas circunstancias, a través de barreras aparentemente impenetrables.

Pues bien, este tipo de fenómenos tan curiosos y contradictorios pueden ocurrir en el mundo de las partículas subatómicas pero no en la realidad macroscópica.
No me cansaré de repetir que no hay atajos para construir una Marca Personal. Es una tarea larga, dura y dificil. Por eso no hay millones de Marcas Personales.

Igual que los electrones, las personas nos encontramos con barreras de potencial que tenemos que atravesar. El problema es que ese muro se va haciendo más alto a medida que nos hacemos mayores o mejor dicho, a medida que nos vamos acomodando.

Los miedos y las hipotecas pertenecen a la Mecánica Clásica de la vida. Desgraciadamente no hay nada parecido a la Mecánica Cuántica para la Marca Personal.

Si alguien busca una fórmula mágica y rápida para construir su Marca Propia que no cuente conmigo.

Todas las Marcas Personales que han llegado a serlo han tenido que ser persistentes, poner a prueba sus valores, dejarse impulsar por sus pasiones.
Nadie les ha regalado nada. No ha habido un Efecto Tunel que les llevase al otro lado. Y a muchos les ha costado la vida (o casi).

No todos vamos a ser Mandela o Coppola. Ni falta que hace.
Sin embargo, podemos construir nuestras Marcas Personales pensando en nuestro entorno más cercano (¿mercado?).

En el trabajo, en las relaciones personales, en la familia nos enfrentamos diariamente a multitud de situaciones que ponen a prueba la consistencia de nuestra marca.

¿Vas a esperar a esa probabilidad NO nula? ¿O vas a hacer lo posible para superar la barrera?





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