Aficionado o profesional

VentaAficionado. Que cultiva o practica, sin ser profesional, un arte, oficio, ciencia, deporte, etc.
Profesional. Que practica habitualmente una actividad, incluso delictiva, de la cual vive.
RAE

Hace poco, mi amigo y colega Xavi Roca citaba varias frases en su Facebook en las que hablaba de la pasión y la profesión. Estoy de acuerdo con muchas de ellas en las que se entiende que si haces algo que te gusta todo será mucho mejor o como decía Confucio “escoge un trabajo que te apasione y no trabajarás ni un día más en tu vida”.

En La Red circulan muchas frases y citas que hablan sobre todo esto y yo mismo he utilizado algunas. Creo que es estupendo hacer lo que te apetece en esta vida. El problema es que normalmente y más en situaciones de crisis como la actual, te das con un canto en los dientes si encuentras el modo de generar ingresos, con pasión o sin ella.

En algunas ocasiones he pensado que en eso de predicar que uno debe hacer lo que le gusta hay algo de falta de respeto hacia quienes no tienen trabajo o hacia aquellos que hacen algo que no les entusiasma porque no les queda otra. Pero además ¿Qué trabajo no tiene una parte importante que no es «apasionante»?

De hecho, creo que el concepto de pasión está más cerca de lo que dice el diccionario, que de lo que solemos entender en el mundo de fantasía de dospuntocerolandia.

Conozco a Xavi desde hace tiempo y creo que es una de las personas más inteligentes, sensatas y buenas que me he encontrado. Por eso creo que frases como «La auténtica prueba para saber si has encontrado tu pasión es si realizarías tu actividad profesional sin cobrar» son buenos indicadores de que estás dedicándote a lo que te gusta. Pero me parecen muy peligrosas si se toman literalmente.

Esta semana he estado con mis buenos amigos de Soymimarca, Jordi, Guillem y Arancha y, entre otras cosas, hablábamos del peligro de la gratuidad para los profesionales independientes. Como dice Jordi, #logratismata

Los Señores del Facebook, Google, Twitter y otras hierbas han conseguido lo mismo que Tom Sawyer en la escena de la valla. Nos han convencido de que trabajemos para ellos generando contenidos y encima pensemos que es algo apasionante cuando en realidad es lo más parecido a un empleo no remunerado.

Eso de trabajar sin cobrar parece que se ha convertido en el nuevo mantra. Hay que compartir. Hazlo gratis. Pero parece que perdemos de vista que los que han cobrado toda la vida siguen haciéndolo. A ti nadie te llena el depósito de gasolina por la cara ni puedes coger lo que te apetezca del supermercado sin pasar por caja ni puedes encender la luz sin que te lo cobren en el recibo.


Eso de lo gratuito, lo desinteresado y lo filantrópico parece que sólo se aplica a quienes precisamente tratan de hacer aquello que les gusta. Se confunde demasiado frecuentemente que disfrutes con tu trabajo con que estés dispuesto a hacerlo y vivir del aire.

Si tienes un blog en el que hablas de algo que te entusiasma, cada semana vas a recibir propuestas en la que te «invitan» a hacerlo por amor al arte. Y eso es especialmente frecuente si tu profesión está relacionada directamente con otras personas. Y eso incluye desde la asesoría fiscal hasta los especialistas en Internet pasando por los fontaneros o los psicólogos.

Hay cosas que no se te ocurriría pedir jamás a una empresa pero si se lo pides a alguien con cara y ojos y te dice que no, puede que incluso te sientas ofendido. Lo que no suele pensarse es que cuando le pides a alguien que te «regale» su trabajo es como si le pidieses dinero prestado.

Mientras siga extendiéndose la idea de que por el simple hecho de que haces lo que te gusta no tienes que cobrar por ello viviremos en un mundo de aficionados. Y eso no está mal en ciertas ocasiones. En el mundo de la astronomía muchos de los descubrimientos han sido hechos por aficionados. Pero cuando se trata de ganarse la vida hay que pensar como un profesional.

Creo que hay buenos aficionados y malos profesionales. Pero no es eso lo que les diferencia sino la capacidad de vivir de tu actividad (aunque sea delictiva como dice la RAE).

Si quieres que tu Estrategia Personal tenga una continuidad, antes o después debes entender que tu trabajo y el de los demás tiene un valor. De lo contrario tu aventura profesional va a durar dos telediarios.

Está muy bien eso de apasionarte por tu profesión pero creo que no debes olvidarte de que si quieres sobrevivir debes profesionalizar tu pasión.

El mérito no está sólo en dedicarte a lo que te gusta, sino además, poder vivir de ello. De lo contrario «sólo» serás un aficionado.





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