Contenidos. Si no cuentas, no cuentas
Suelo decir que el Currículo no es una buena herramienta para demostrar tu valor porque se limita a decir lo que haces, pero no demuestra nada y, además, es poco fiable.
Entonces, si queremos que alguien nos tenga en cuenta para un empleo, un proyecto o una oportunidad profesional, ¿Cómo podemos superar esa barrera de desconfianza? Pues mostrando de todas las maneras posibles aquello que decimos que podemos hacer.
Afortunadamente en este momento no sólo tenemos la posibilidad de poner en un escaparate global nuestras cualidades sino también de monetizarlas. Pero eso implica un plan y, sobre todo, trabajo y disciplina.
No te contengas con los contenidos
Como suele ocurrir con muchas de las cosas dospuntocero, el gran problema no suele estar relacionado con los aspectos técnicos o económicos sino con los ceropuntocero, con las creencias y los miedos.
Todos tenemos cosas que contar, errores, éxitos, anécdotas, opiniones, aprendizajes,… Sin embargo, la mayoría de la gente que conozco, ni se plantea compartir nada de lo anterior. Pero, si no transmites lo que eres y lo que sabes, ¿Cómo esperas que te encuentren? ¿Qué posibilidades existen de que alguien sepa que eres «de los suyos»? y lo más importante para una Marca Personal, ¿Por qué debería fiarme de ti?
Tengo muy claro que lo más importante a la hora de generar contenidos no es la técnica o el estilo, eso es algo que se aprende con el tiempo. Lo fundamental es superar esa barrera de potencial que nos mantiene como observadores, espectadores al otro lado de la pantalla o del escenario y atreverse a dar la cara, aunque exista una posibilidad de que te la rompan. De todos modos, mi experiencia me dice que eso no ocurre casi nunca.
Elige el medio que prefieras
Una de las mejores noticias que te puedo dar es que las opciones disponibles para contar y demostrar lo que sabes son múltiples y puedes elegir aquella o aquellas con las que te sientas más cómodo.
Si te gusta o eres hábil escribiendo, ya tienes una gran parte del trabajo hecho. Como te he comentado aquí varias veces, casi todo pasa por plasmar las ideas en un papel o en un documento digital. Blogs, libros (en papel o electrónico), presentaciones, artículos,…
Si te quitas el miedo o la vergüenza a ponerte delante de una cámara, poco a poco verás como, no sólo le coges el tranquillo sino que además te acabarás divirtiendo.
Si quieres algo intermedio, simplemente estructura tus ideas y conviértelas en ficheros de audio que puedas compartir en un podcast.
Sinceramente, me preocupa que haya tanta gente con ideas valiosas, interesantes, emocionantes, creativas, extravagantes o geniales que se las estén guardando para ellas por temor, pudor o simplemente desconocimiento. Pero todavía me cabrea más que esta gente esté perdiendo oportunidades haciendo cosas muy por debajo de sus cualidades simplemente porque han decidido mantenerse en la sombra.
Tu contenido te representa
Las cosas que cuentas y muestras son tu ventana al exterior. La gente te va a juzgar por lo que enseñas y por cómo lo comunicas.
Si decides mantener silencio está claro que nadie va a criticar tus ideas o propuestas, pero es que simplemente pasarás desapercibido y ni aumentará tu valor ni tus opciones.
Pero si te atreves a dar la cara en vídeo, en una grabación de audio de media hora, en un manual sencillo para explicar como hacer algo o en una serie de posts en un blog, poco a poco irás «materializándote». La gente pensará en ti como alguien a quien recurrir cuando necesite algo de lo que te consideran capacitado.
Efectos colaterales
Pero crear contenidos tiene consecuencias indirectas muy interesantes que van más allá de lo que cuentas.
El hecho de escribir durante meses o años en tu blog de forma regular, me está diciendo mucho de ti. Me transmites que eres una persona disciplinada, fiable, capaz de mantener una regularidad basada en una idea o en una visión. Y eso es muy útil para conseguir un empleo o un proyecto. No tienes que responder que eres persistente cuando te pregunten por sus cualidades en una entrevista de trabajo, simplemente basta con que se asomen a tu página web.
Uno de las mayores preocupaciones a la hora de generar contenidos es el CÓMO. ¿Cómo consigo un buen sonido en un podcast? ¿Cómo puedo editar un vídeo de forma sencilla? ¿Cómo ordeno la información para un libro electrónico? ¿Cómo encuentros ideas para mi blog?
Lo genial es que todo se aprende y es mucho más fácil y motivador aprender si tienes un objetivo. Si decides ponerte en marcha y empezar a crear contenidos, poco a poco irás superando dificultades y verás que esas barreras «insalvables» son sólo pequeños obstáculos que parecían peores de lo que son.
Así que, si quieres «saltarte» las entrevistas de trabajo o las reuniones comerciales, haz los deberes, muestra lo que eres capaz de hacer sin esperar a que te lo pregunten, deja claro lo que vales sin ningún género de duda.
Saca lo que tienes de tu cabeza y de tus manos y hazlo visible. Crea contenidos.