Como la mayoría de la gente en estas fechas, me he pasado por uno de esos centros comerciales clónicos que hay en todas partes. Miles de personas entrando y saliendo de las tiendas con carritos repletos de bolsas y paquetes de colores. Parrillas para cocinar sin grasa, la casa de Pin y Pon, las primeras temporadas de cualquier serie en DVD, juegos para la gamebox, y como no, la clásica