¿Fin de curso?

Da igual la situación en la que se encuentre nuestro país, a medida que nos acercamos a los meses de verano la actividad se va paralizando hasta que entra en coma. A finales de junio empieza a ser inutil tratar de poner en marcha cualquier actividad hasta mediados de septiembre. Así que, en estos años como Agente Libre me he acostumbrado a cambiar mi actividad sin dejar de trabajar durante julio y agosto.

Es cierto que lo que voy a decir a continuación no es directamente aplicable a todos los profesionales, pero creo que puede adaptarse con facilidad.

Igual que ocurre con los críos, podemos pasarnos unas semanas «desconectados» y tumbados a la bartola en la piscina o en la playa por lo mucho que hemos trabajado y por lo que nos va a tocar currar a la vuelta o podemos poner en marcha un miniplan de I+D profesional.

Quizás no tengas ningún interés en cambiar, ni en mejorar. Quizás solo te interese mantenerte profesionalmente como estás, pero es que, tal y como están las cosas, incluso ese mantenimiento implica un esfuerzo. Y para eso debes hacer algo para desarrollar y potenciar tu Marca Personal.

En uno o dos meses puedes hacer muchas cosas interesantes y útiles para tu proyecto de Branding Personal si te planificas. De ese modo, cuando vuelvas a la cruda realidad, tendrás algunas herramientas que podrás utilizar y que en el follón de la rutina diaria nunca tienes tiempo de hacer. Aquí tienes algunas ideas.

Reflexiona

Una gran parte del trabajo de diseño de un proyecto de Branding Personal se basa en la planificación y en la reflexión. La mayor parte de las personas no tiene ni idea de cuales son sus objetivos, sus prioridades, sus motivaciones. Y sin esos elementos es imposible diseñar estrategias de ningún tipo. El problema es que para conseguir dar con esas claves se necesita tiempo, tranquilidad y un cierto alejamiento del «ruido» que nos rodea.

Posiblemente estos días o semanas de alejamiento (aunque no te muevas de tu casa) pueden servirte para empezar a fijar esos puntos en el «mapa». Dedica un rato a pensar en ello o de lo contrario volverás a pasar otro año en blanco. Quizás un paseo por la playa antes de amanecer puede ser muy inspirador y puede cambiarte la vida.

Aprende

Conozco a mucha gente a la que le sucede lo mismo que a mi. Nos encanta leer y poco a poco vamos acumulando libros que posiblemente jamás podremos disfrutar. Estos meses son ideales para tener siempre un libro al lado que podamos subrayar y saborear. En unos cuantos días podemos leer esos cinco o seis libros sobre ese tema que nos apasiona y al que quizás algún día podamos dedicarnos. Fotografía, Presentaciones, Dospuntocero, Finanzas, Storytelling, Marketing, Gestión de Proyectos, Influencia, Comunicación No Verbal, Coaching,…

Hay tantas cosas interesantes por aprender y tan poco tiempo para hacerlo… Lo dificil es empezar, así que, ¿Por qué no pones la primera piedra? Te aseguro que, a partir de ahí, la cosa es más facil. Acércate a una librería, pregunta y gástate un dinerito en eso que te apetece. Es la mejor inversión que puedes hacer.


Busca

A veces no todo es tan facil como comprarse unos libros. También hay que hacer un esfuerzo por encontrar aquello que necesitamos y que no está en las tiendas. Cuando tenemos que trabajar de nueve a cinco (o seis, o siete,…) no tenemos tiempo ni ganas por hacer de detectives, pero ahora tenemos una ventana temporal que nos lo permite.

Puede que necesites un consejo de alguien a quién (todavía) no conoces, puede que necesites algo de dinero para poner en marcha tu idea, puede que te falte algo de formación para atreverte a dar el salto o puede que tu carencia sea algo tan simple como dedicar atención a tu familia porque es la que te proporciona la energía que has perdido. Es el momento de ir con la lupa buscando y encontrando esos recursos sin los que no puedes avanzar. Aprovecha estos días.

Practica

Conozco a mucha gente (incluido yo mismo) que estaría dispuesta a actuar si tuviese la oportunidad de empezar. Puede que se trate de escribir, de hablar ante un grupo de personas o de establecer relaciones. El problema es que en la vorágine diaria no suele quedar mucho tiempo para hacerlo.

Con el tiempo vamos cogiendo miedo. Al no hacer las cosas parece que somos incapaces de poder hacerlas. La única forma de perder el miedo es actuando. Y el milagro se produce cuando ves que algo que pensabas que era imposible, resulta que es lo más normal del mundo. Es el momento de tirarte a la piscina (metafórica) antes o después de tirarte a la piscina (real). En dos o tres semana tendrás la sensación de poder comerte el mundo.

Crea

Hay cuestiones «técnicas» relacionadas con la visibilidad de la Marca Personal como la puesta en marcha de un blog, la utilización de las Redes Sociales o la creación de videos o presentaciones. La mayoría de ellas no requieren demasiado tiempo pero se necesita ese momento de tranquilidad para poder sentarse y hacerlo. Una vez creada la estructura, lo demás es sencillo.

Utiliza ese momento del día en que todavía todo el mundo está durmiendo y los críos no se han puesto a dar gritos para crear ese perfil en Twitter o Linkedin o instalar WordPress.

Conoce

Si hay algo que el verano facilita son las relaciones. Si ves que alguien está leyendo un libro que te interesa, atrévete y díselo. Si podéis jugar un partido con los de la urbanización de enfrente, hazlo. Si hay una actividad cultural, acércate. Los días son largos y la gente vive en la calle, así que, puedes aislarte o puedes aprovechar para empezar a tejer una red más potente que cualquiera de las que hay en Internet.

Estas son solo algunas ideas de puro sentido común. Puedes aprovecharlas o puedes dejar que pase otro verano en blanco. Lo mejor de todo esto es que nadie te va a decir lo que tienes que hacer o cómo debes hacerlo. Déjate llevar. Haz lo que más te guste. Pero haz algo de una puta vez.


Compartir esta publicacion