Anti

PosicionHace bastante tiempo que decidí no opinar abiertamente de política en mi blog porque creo que eso debe quedar dentro de mi ámbito más privado. Por eso, aunque hoy voy a hacer referencia a un partido que todos podemos imaginar, es únicamente como punto de partida para desarrollar un argumento relacionado con el Branding Personal.

Todo empezó hace unos días mientras repasaba algunas notas sobre los pilares de una buena Marca Personal. En ellas recordaba lo importante que es estar enfocado hacia las soluciones. Normalmente las Marcas Personales y comerciales que tienen más valor son aquellas que detectan necesidades y problemas e inmediatamente ofrecen respuestas. Cuanto más creativas, innovadoras y originales sean las propuestas, más valor tendrán esas marcas. Por eso tiene tanto valor una empresa como Apple y por eso Steve Jobs se ha convertido en un icono.

Creo que no descubro nada si digo que uno de mis errores durante estos años ha sido el de criticar y atacar, muchas veces de forma exagerada e injusta temas como los Recursos Humanos o algunas tendencias dospuntocerolenses. Sigo pensando que se siguen haciendo muchas cosas mal, sin embargo, la lección aprendida es que para que te valoren no basta con decir lo que está mal sino que inmediatamente hay que ofrecer soluciones válidas. Si no tienes nada mejor que ofrecer, mejor cállate.

Lo cierto es que ponerse en modo ANTI o posicionarse como un contreras que cree que hay que acabar con todo lo actual sin aportar algo realmente útil y probado es demasiado fácil y yo diría que es incluso agradable porque no tardan en aparecer personas que sintonizan contigo, que se consideran víctimas del sistema (muy pocas asumen su cuota de responsabilidad) y te dan palmaditas en la espalda.

Siempre que una persona critique lo existente va a encontrar gente que la acompañe y que salga a gritar con ella. Pero, y luego ¿Qué?

Si yo estoy dispuesto a pagar, votar o enamorarme de algo o alguien no es sólo porque todo le parezca mal sino porque va a hacer algo que mejore mi situación. El problema es que una vez pasado el subidón, no queda nada.

Lo ANTI funciona muy bien. Hemos visto como algunos de los tiranos más crueles de la historia se han subido al carro de lo ANTI, de buscar un enemigo fácil. ¿Hay algo más sencillo que poner una «etiqueta», una estrella de David o un distintivo de otro tipo para señalar y eliminar a quienes no te gustan? ¿Hay algo más fácil que hacer chistes metiéndose con una persona o un grupo de individuos con alguna característica común? Los ANTI siempre han sido unos excelentes marketinianos encontrando eslóganes y mantras.

Recuerdo unos cursos que impartí hace unos años en un parque temático en los que me decían que si a alguien le gustó la experiencia no se lo contaría a mucha gente pero que si tuvo algún problema, se enteraría todo el mundo. Lo negativo se extiende como la pólvora, especialmente en un país como el nuestro.


La crítica engancha. Lo ANTI te hace sentir que formas parte del rebaño. Es incluso estimulante verte rodeado de gente que grita lo mismo que tu contra alguien que normalmente no está presente. Miras a tu alrededor y te encontrarás con mucha gente que está CONTRA algo pero verás a muchos menos que ofrezcan soluciones. Quizás por eso en este país casi todo el mundo sueña con ser funcionario pero muy pocos se atreven a montárselo por su cuenta.

Todos conocemos a los típicos pesados de oficina y de máquina de café que no hacen más que criticar todo lo que haga la empresa. Que te cogen en un rincón y ponen a parir a cualquiera que haya hecho (o no) algo que no les parezca bien. Durante algún tiempo puede tener algo de gracia escuchar a esa gente, pero poco después acabarás huyendo de ellos porque son destructivos, tóxicos y desmoralizadores.

Puede que durante algún tiempo estuvieses saliendo con alguien que nunca te ofrecía propuestas divertidas o interesantes para hacer juntos pero que cuando tu le planteases algunas ideas te dijese que no a todas. Supongo que acabaríais dejándolo. Y si no es así, pues lo siento.

Lo ANTI es perezoso. Simplemente se limita a coger lo existente y eliminarlo. Desgraciadamente casi nunca proponen algo mejor o realmente válido que funcione o algo peor, proponen soluciones que jamás han visto la luz más allá de un papel o de un libro de un intelectual o un teórico que no ha tenido demasiadas oportunidades de dirigir o gestionar nada. Y esto ocurre en la política, los Medios Sociales, la gestión de empresas o el fútbol.

Como digo, si hay alguien con fuerza moral para decir todo esto, soy yo. Durante mucho tiempo me he dedicado a criticar y a ponerme ANTI. Y todavía me sale con frecuencia. Sin embargo, he comprobado a base de palos que si alguien te va a comprar, leer o casarse contigo es porque le estás dando algo que realmente merezca la pena.

Creo que con los políticos que nos han dirigido en las últimas décadas ocurre como con Windows. Tienen muchos fallos, nos dejan colgados, son torpes, son poco atractivos, cada actualización es peor que la anterior, son fácilmente corrompibles,… pero de momento no ha surgido un LINUX o un iOS en el mundo de la política, todo lo que hay es gente que cree que es mejor volver a las tarjetas perforadas.

Si quieres dejar huella, puedes y debes detectar problemas y necesidades, pero inmediatamente después debes ofrecer soluciones y propuestas válidas y probadas o, al menos, que se sostengan. Es la única manera de que tu Marca Personal sea reconocida y valorada.





Compartir esta publicacion