Estructura, aprovecha tus recursos limitados
Cuando hablamos de Estrategia y Marca Personal damos mucha importancia a los aspectos que nos definen, a nuestra identidad, valores, motivaciones, creencias, conocimientos, experiencias, etc.
Esto tiene todo el sentido porque sobre esos pilares se construye todo lo demás. Por eso, además, suelen ser los temas que se tratan al principio de un proceso de Branding Personal.
Sin embargo, también hay factores externos que van a influir en la consecución de los objetivos que establezcamos y sobre los que no tenemos tanto control.
Me refiero a lo que yo denomino Provisiones o Estructura e incluye cuestiones como el Tiempo, Dinero, Infraestructura, Salud o Relaciones.
Si no queremos quedarnos bloqueados o, algo peor, utilizarlos como excusa para no movernos, debemos aprender a gestionarlos.
Lo primero, inventario
Como es lógico en cualquier proceso que queremos completar con éxito, en primer lugar debemos saber con qué contamos. No basta con decir, sin haberlo analizado antes, que no tienes tiempo o careces de dinero para conseguir lo que buscas.
Se trata de hacer una auditoría, de rebuscar y encontrar cualquier recurso que pueda estar escondido o que puedas haber olvidado.
A lo mejor tienes una colección de videojuegos de los 80 que puedes vender en alguna plataforma de Internet. O puede que te des cuenta de que tienes un montón de tiempos muertos que puedes utilizar para ir avanzando poco a poco en tu proyecto, quizás unas líneas de tu libro o un par de llamadas a un potencial cliente. O, de pronto descubres que tienes buenos contactos en el sector en el que quieres introducirte pero de los que te habías alejado un poco.
Lo siguiente, diagnóstico
Muy bien, ya sabes lo que tienes… y también has descubierto lo que te falta. Tienes que evaluar qué es lo realmente importante.
¿De verdad necesitas gastarte ciento y pico Euros en un micrófono porque quieres crear un podcast de gestión de calidad o sería suficiente un micro decente de móvil por menos de veinte Euros?
¿En serio vas a apuntarte a un curso de WordPress de varias semanas porque quieres crear tu propio sitio en Internet? ¿Podrías conseguir lo mismo mucho antes y a un coste menor?
Este es el momento en el que, una vez que sabes lo que tienes, debes decidir lo que te falta y lo que no necesitas realmente.
Y ahora Estrategia
Es el momento de tomar decisiones. ¿Qué puedes aumentar, reducir, eliminar o cambiar? Esta es la parte dura del proceso. Especialmente cuando se trata de eliminar.
Si de verdad quieres sacar tu proyecto personal o profesional adelante, debes elegir. Y esas decisiones son sólo tuyas. Por eso es tan importante la responsabilidad individual cuando hablamos de Estrategia y Marca Personal.
Pues si, vas a tener que decidir qué parte de tu tiempo vas a reinvertir en algo más útil. Qué gastos puedes reducir o eliminar para pagar esa pieza o servicio que necesitas. Incluso puede que tengas que cambiar tus relaciones para centrarte en aquellas que no sólo no te van a frenar sino que pueden acelerar tu proceso.
Y si, la salud también es un recurso que incluyo dentro de la Estructura. ¿De qué te sirve tener Dinero, Tiempo e Infraestructura si ya te levantas cansado o eres incapaz de hacer algo que requiera un mínimo esfuerzo si no te cuidas?
Juega con los recursos
Una de las cosas más interesantes e incluso divertidas de la gestión de recursos es la posibilidad de combinarlos.
Por ejemplo, si tienes un cargo importante en una empresa que te proporciona un sueldo decente, pero quieres montártelo por tu cuenta, es posible que no tengas demasiado tiempo, pero quizás dispongas de dinero.
Así que, en lugar de aprender a crear tu propio sitio web, ¿por qué no contratas a alguien que sepa?
O quizás estás pasando una mala racha y estás sin un Euro, pero tienes buenas relaciones con gente que te puede apoyar (y tú a ellos) y además dispones de tiempo. ¿Y si en lugar de lloriquear por la mala suerte, aprovechamos cada minuto que tenemos a nuestra disposición? ¿Y si, empiezas a hacer algo de deporte para sentirte mejor y presentar un aspecto más atractivo?
¿Y si utilizas los equipos e infraestructura que habías guardado en un armario o en un trastero? No sé tú, pero yo que tengo un poco de Síndrome de Diógenes siempre encuentro algo que puedo reutilizar, un viejo equipo de música que sigue grabando de maravilla, un ordenador antiguo con el que puedo montar una red en casa o un móvil de penúltima generación que está cogiendo polvo pero que tiene una cámara más que decente.
Lo que quiero decirte es que, posiblemente tienes más recursos de los que piensas. Y tal y como están las cosas, quizás es el momento de retirarse a los cuarteles de invierno, revisar los recursos y prepararse para salir lo antes posible a la batalla.
Ah, que no se me olvide. Ya tenemos un libro que va a ser un clásico en el mundo de la Marca Personal. Y te aseguro que es de los que tienen chicha y mucho para subrayar. Si no aportas, no importas de mi querido y admirado Guillem Recolons.