Mercado libre
¿Hay un verdadero mercado libre de talento?¿Están los mejores profesionales ocupando los puestos que les corresponden?¿Porque muchas empresas e instituciones están gestionadas por mediocres?
Durante las últimas décadas se ha hecho un esfuerzo importante por establecer los estándares de calidad de los productos. Se han conseguido liberalizar de una forma importante los mercados de materias primas y bienes de consumo. Sin embargo, no ha ocurrido lo mismo con las personas. Hasta ahora no ha sido posible ni siquiera establecer unos parámetros mínimos con los que valorar a los profesionales. Los teóricos llevan décadas hablándonos de intangibles como el liderazgo o la capacidad de comunicar pero nadie ha establecido un sistema real de valoración. Evidentemente cada puesto exigirá unas habilidades determinadas, pero no hay forma de demostrarlas ni certificarlas igual que se hace por ejemplo con las pruebas de idiomas.
Si se consiguiese tener claras las calificaciones de cada profesional, sería más facil ajustar el puesto con la persona, además de poder reforzar aquellas habilidades más débiles.
De momento estos temas están en manos de empresas que están ganando muchísimo dinero a base de pruebas o como ellos lo llaman, test de personalidad o más pedantemente «assesment centers». Ya es hora de establecer unos métodos de evaluación generales que abarquen todas las habilidades necesarias para un profesional actual y ponerlos a disposición de quienes quieran certificarse y añadir ese dato a su historial profesional.