Imágenes veraniegas: A los cocineros se les va la olla

Como en años anteriores, empiezo esta miniserie de Imágenes Veraniegas para hablar de Branding Personal pero de una forma más «fresca».

Desde hace algún tiempo, me llama la atención el nivel de notoriedad de determinados profesionales. El caso es que no acabo de entender porqué algunos peluqueros (que atienden a una minoría) han adquirido un nivel de prestigio mayor que el de los maquilladores de los tanatorios (por donde todos acababamos pasando).

O porqué pocos son capaces de nombrar a un químico pero, sin embargo, conocen más de media docena de cocineros, algunos de los cuales utiliza la química para preparar sus platos.

Porque, ¿Cuantos científicos españoles conoces? ¿O bomberos? ¿O policías? ¿Conoces el nombre de la persona que te atiende en tu banco? Todos ellos son importantes para tí, o podrían serlo. Sin embargo, pasan desapercibidos.

El caso es que desde hace algunos años no paramos de ver como algunos cocineros alcanzan estatus equivalentes a los de futbolistas o jueces estrella.

Ya hace cuatro años que escribí un post parecido, pero las cosas han ido a peor. Los cocineros ya no son famosos solo por lo que hacen entre los fogones (o los tubos de ensayo). Ahora nos los encontramos en todas partes. Te los puedes encontrar dando lecciones de creatividad a los empresarios o anunciando colchones.


¿Y que tiene que ver un  cocinero de platos de diseño (de los que te dejan con hambre) con la estrategia del departamento de logística? Seguramente nada. Pero siempre podrá «fabricarse» alguna relación del mismo modo que podría establecerse una conexión entre el gotelet y la gestión del talento si los profesionales de moda hubiesen sido los pintores.

Y desde el punto de vista de la Marca Personal yo me pregunto ¿Cómo favorece el anuncio de Pikolin al posicionamiento de Adriá? ¿Querrá decirnos aquello de cria buena fama y échate a dormir?

Cuando yo era pequeño solo había uno o dos cocineros conocidos. Y eran famosos por un solo plato. ¿Cuantas veces habré visto a Cándido partiendo un cochinillo con un plato? Yo no se si el cocinero segoviano podría dar lecciones de Management, pero lo que está claro es que la Marca Personal que ha dejado en una generación es indeleble. Lo que está claro es que en Cándido se siguen sirviendo lechones mientras otros tienen que replantearse su continuidad.

Como en tantas otras profesiones, posicionarse como especialista en una determinada actividad fortalece tu marca. Incluso en algo tan primario y básico como un torrezno existen expertos («unicos especializados»). Si eres el mejor en algo no tienes que estar inventando la pólvora cada día. Simplemente debes mejorar en lo que haces.

Yo no se si el cambio de posicionamiento, de cocinero de laboratorio al de especialista en creatividad le va a ayudar a vender colchones. Pero lo que está claro es que si quiero comer bien, buscaré antes a un experto en cochinillo o torreznos que a un alquimista que me ponga espumarajo aire de zanahoria.

Y solo de pensar en un colchón diseñado por Ferrán Adriá ya me da dolores de espalda.


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