Si te he visto no me acuerdo

Supongo que a estas alturas del año, uno empieza a estar agotado y no todo se ve con optimismo. Y si encima le ocurre a un quejica crónico como yo, pues peor. El caso es que llevo algunos días pensando en un asunto que puede parecer contradictorio con el Branding Personal. Se trata del exceso de visibilidad.

Al navegar por Twitter, Facebook o por la blogosfera o incluso al asistir a algunos eventos, me vienen a la mente expresiones como: «Más visto que el TBO», «Visto y no visto» o «Si te he visto no me acuerdo».

Digo esto porque empiezo a ver las mismas caras en todos los sitios. Incluida la mía. No creo que haya que culpar a la tradicional endogamia de La Red. Creo que los que están es porque llevan mucho tiempo dando guerra y creo que es justo que se les tenga en cuenta en todas las listas.

Lo que no sé es hasta que punto es bueno para la Marca Personal de un profesional estar todo el día en los medios dospuntocerolenses (incluidos los eventos offline asociados). En realidad dospuntocerolandia es un mundo minoritario, aunque todos los días nos den cifras espectaculares de Twitter, Facebook o Tuenti.

Esta semana comentaba en Twitter que esto se parece cada día más a un restaurante japones en el que te preparan la comida delante de tí. Yo mismo estoy hablando del proceso de escritura de un libro en Twitter. Y no se si esto tiene sentido si no eres un cocinero japonés. Eso de contar hasta las veces que vas al baño o de subir a Twitpic cada plato de comida que te ponen en la mesa dudo mucho que te ayude a posicionarte como experto en Business Inteligence o Responsable de Logística.


Creo que es muy facil pasar de ser tenido en cuenta porque estás en todas partes a ser despreciado o devaluado por la misma razón. Me da la sensación de que esta obsesión por estar en el candelero desde que te levantas hasta que te acuestas, o incluso después, no es más que una nueva maldición de Sísifo. Parece que haya que estar todo el día echando carbón en la caldera de Google para que no se apague. Y no se si eso merece la pena, si hay otras alternativas o incluso si al final puede ocurrir que la máquina explote.

Al desarrollar un proyecto de Marca Personal hay que ser útil, fiable y visible, pero me estoy encontrando con algunos casos en los que solo se cumple la última parte. Eso puede producir una asociación peligrosa entre persona popular pero carente de valor. Me he encontrado con algunas personas, especialmente en «el mundo real», que creen que quienes están todo el día generando notoriedad no pueden tener tiempo para otra cosa.

Al hablar de gestión de Branding Personal, quizás la clave no está en Branding ni en Personal sino en gestión. Creo que es fundamental escoger cuando, donde y con quién vas a relacionar tu Marca Personal. No se trata de aburrir a todo el mundo con impactos continuos, sino de escoger aquello que sea útil tanto para el emisor como para el receptor de la influencia. Pero vamos, que esto es sentido común puro y duro.

Es verdad que La Red genera una falsa sensación de actividad. Es un poco como con La Casa Real, en realidad no trabajan mucho pero como lo poco que hacen aparece en todas partes, parece que tienen una actividad frenética. Como aquí se twittea y se facebookea todo por duplicado, parece que uno es una especie de ser omnipresente cuando en realidad no es así.

Este es uno de mis típicos posts tenebristas pero es que esta semana si que he trabajado… un poco.





Compartir esta publicacion