Catálogo de productos

Parece que ayer fue el día de Grecia. En la tele pusieron Mi gran boda griega y cada dos por tres ponían el anuncio del griego de Danone. También en las noticias decían que el país tiene noseque problemillas financieros.

Durante algunos años me encargué de gestionar el lanzamiento de algunos productos de marca blanca en Grecia y viajé unas cuantas veces a aquel país. Los griegos siempre me han parecido una gente un poco dejada pero encantadora.

Recuerdo un día que me alojaba cerca de la Acrópolis. Quería visitarla pero tenía que salir muy temprano a visitar proveedores. El caso es que madrugué, estaba amaneciendo, serían las 7 de la mañana, y me acerqué a ver si podía ver algo. A esas horas estaba cerrada y faltaba mucho para que llegasen los turistas, pero había unos militares o policías vigilando. Les dije lo que me pasaba. ¿Sabes lo que hicieron? ¡Me dejaron entrar!

Creo que esta anécdota puede servir para entender un poco el caracter de esa gente estupenda. El caso es que en este momento Grecia ha consumido todos sus recursos y seguramente muchos más. La cuestión es, «Y ahora, ¿De que vamos a vivir?»

Para muchas personas, la situación es parecida a la de Grecia. Puede haber profesionales majísimos, entrañables y encantadores, pero muy pocos han hecho nada para desarrollar su oferta profesional o añadir «productos» a su catálogo.

Si nuestra profesión es nuestra empresa y nuestro trabajo es nuestro producto, debemos pensar y actuar como empresarios. La Marca Personal y los «productos» asociados a ella tienen su ciclo de vida igual que cualquier otro producto o servicio comercial. Así que constantemente debemos estar innovando y renovando nuestra oferta.

Aquella carrera que estudiaste hace veinte años no es que haya quedado obsoleta, es que seguramente ni existe. Aquellas herramientas que utilizabas cuando empezaste a currar ahora están en los museos. Eso de tener alguien que te escriba las cartas o te haga las llamadas parece algo de la Revolución Industrial… y tú no te has enterado.

En esta situación debes hacer algo para generar y regenerar tu oferta profesional o te va a pasar como a mis queridos amigos griegos. Debes encontrar el modo de responder a la siguiente pregunta: Y yo, ¿Qué puedo vender?  o ¿Cómo puedo ganarme la vida?

También te digo lo siguiente, todos tenemos algo que ofrecer. Todos sabemos hacer algo que puede ser valioso. Y aquí no me estoy poniendo místico o buenista. Es algo absolutamente cierto. Todos tenemos «materia prima» para construir algo relevante para un nicho de mercado. Basicamente debes analizar las siguientes cuestiones.

  • Ingredientes. ¿Qué cosas sabes hacer? ¿Qué has aprendido? ¿Qué experiencias (de cualquier tipo) pueden ser útiles?
  • Recursos. ¿Con qué recursos materiales o de conocimiento cuentas? ¿Qué personas te pueden apoyar? ¿Qué te falta? ¿Como puedes conseguirlo?
  • Producción. ¿Cómo puedes combinar tu «materia prima»? ¿Qué puedes hacer con lo que sabes de portugués y tu talento para la fotografía? ¿Cómo puedes combinar tus estudios con tus habilidades naturales?
  • Mercado. ¿Qué necesidades existen (de cualquier tipo) que puedas satisfacer en tu entorno? ¿Qué beneficios concretos puedes proporcionar con lo que eres capaz de hacer (aunque no aparezca en tu CV)?
  • Precio. ¿Cuanto vale lo que haces? ¿Tiene sentido «vender» tu libertad o una mayor rentabilidad de lo que ofreces por un contrato indefinido (No definido. RAE)?
  • Ciclo. ¿En qué momento de tu vida profesional te encuentras? ¿Estás en ascenso, estancado o vas cuesta abajo y sin frenos?
  • Innovación. ¿Cuantas cosas nuevas vas a incluir en tu catálogo cada año? ¿O vas a seguir poniendo en tu CV que eres Lic. en Económicas, Técnico de FP o que tienes nivel medio de Inglés esperando que los «clientes» se agolpen en la puerta de tu casa?

Estas son solo algunas cuestiones que debes tener en cuenta. Quizás cuando empezaste tenías un producto estrella pero poco a poco se ha convertido en un perro y tú ni te has enterado.

Creo que de todo se aprende, y todo esto de la crisis financiera, especialmente lo que está ocurriendo en Grecia debería ser un ejemplo de lo que hay y lo que no hay que hacer.

Por cierto, ECONOMÍA es una palabra de origen griego. Y CATÁLOGO también. Apalancamiento o reflotación también están muy relacionados con ellos. Así que quizás deberían pensar en crear una especie de SGAE para recaudar fondos y Teddy Bautista está disponible. Eso les convertiría en una potencia mundial.





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