Internet. ¿Cuándo dejó dospuntocerolandia de ser emocionante?

Me vas a perdonar porque este año tengo la firme intención de crear contenidos menos opinativos y más prácticos, pero hace tiempo que me ronda la cabeza una idea con más fuerza que en ocasiones anteriores. Me refiero a la creencia cada día más fuerte de que dedicar recursos a estar en La Red es menos y menos rentable en todos los sentidos.

Déjame que me comporte como el «Boomer» o GenX» que soy. Permíteme ir hacia atrás en el tiempo.

Hace pocos días cumplí 55 y puedo decir que no me quejo de la vida que he tenido. No es que haya sido un paseo por un campo de flores, pero he tenido la oportunidad de vivir cosas interesantes, he visto y experimentado muchos «inicios». Te pongo un par de ejemplos «frikis».

En los 80, un tipo genial llamado Clive Sinclair empezó a sacar cacharros muy chulos que nos sirvió a muchos a introducirnos en el mundo de la informática. Creo que Sinclair tuvo infinitamente más influencia para muchos adolescentes de aquella época que Jobs. Y espero que algún día se le reconozca su papel.

El caso es que sacó el ZX80, el ZX81, el ZXSpectrum y algunos otros, que abrieron camino a otros ordenadores domésticos con los que aprendimos a programar BASIC porque si no, no servían para mucho. Commodore, Amstrad, y otras marcas, a pesar de su escasa potencia, hacían maravillas. Fueron años apasionantes en los que se palpaba la ilusión. Para alguien como yo que vivía en Alicante en aquellos años, tener la oportunidad de ir Madrid al SIMO, era como ir a Disneylandia.

Con el tiempo, esa magia se perdió. En los primeros 90 me compré mi primer PC, creo que era un IBM PS/2, a partir de ahí, todo lo que salía era cada día más potente, pero más aburrido. Ya no matabas marcianitos, hacías hojas de cálculo en Lotus y te peleabas con el Wordperfect. Lo de los ordenadores clónicos era una definición perfecta. Desde entonces no he sentido lo mismo que en aquellos años en los que con 16 o 48 Kb podían hacerse milagros.

A mediados de los 90 volví a vivir otra época increíble. Nos enganchamos a Internet y muchos sentimos algo parecido a aquellos años de enamoramiento tecnológico. No voy a repetir aquí lo del sufrimiento de conectarse a la línea telefónica, los precios absurdos de las conexiones y lo cutres (y sobrevaloradas) que eran aquellas primeras webs con Comic Sans y siempre en obras. Pero tenías la sensación de que algo chulo estaba empezando.

A principios del sXXI, se empezaba a hablar de lo dospuntocero porque podíamos conversar y compartir. Pero, con la llegada de las Redes Sociales creo que todo se empezó a desmoronar. Lo que ocurrió simplemente era la constatación de que Internet no es más que un reflejo del mundo real. Y ahí es donde creo que todo empezó a joderse.


¿Te has metido en esto para vivir una mala copia del mundo real pero sin lo bueno de este? ¿De verdad te sigue emocionando «surfear» en La Red? ¿Te entusiasma ver en lo que se ha convertido Twitter? ¿Cuánto tiempo le dedicas a Facebook? ¿En serio crees que compensa echarle horas y horas a ver fotos y vídeos en Instagram o TikTok? ¿Te pone cachondo/a pulir tu perfil de LinkedIn?

Si, vale, has conocido gente interesante (o eso es lo que quieres creer), has aprendido cosas (¿Cuáles? ¿Podrías haberlo conseguido antes por otras vías «tradicionales»?), sigues pensando que puedes ser «influencer», «twitchero» o cualquier otra cosa que salga… porque lo de «YouTuber» ya es un poco viejuno. Pero, ¿no tienes la sensación de que estamos llegando a la fase de «clonización» de lo dospuntocero? Pero con personas en lugar de con ordenadores.

Este post tiene mucho de lo que critico porque es otro ejemplo de que nos dedicamos a dar opiniones como si le importasen a alguien y encima es un poco deprimente. Pero tenía que decirlo.

Creo que es el momento de aceptar lo que muchos hemos ido retrasando. Es la hora de dar un paso atrás o a un lado y centrarte en lo que puede ser útil para ti. Voy a decir algo terrible para muchos, se trata de que es hora de rentabilizar el tiempo y esfuerzo que dedicas a las pantallas. Profesionalizar tu paso por La Red, salvo que sólo consideres este entorno como una fuente de entretenimiento y poco más.

Creo que el mundo no necesita más opiniones, quejas, críticas ni tampoco palabras supuestamente inspiradoras tan bonitas como huecas. Lo que hacen falta son soluciones. Vale, ya sé que con esto me cargo el 90% de los contenidos de Internet, pero es… mi opinión.

La nueva plataforma que quiero poner en marcha y de la que hablaba en el post anterior es un ejemplo de lo que digo, pero también me gustaría dar un nuevo enfoque a este blog. Nada radical o sorprendente, simplemente quiero ir más al grano y centrarme en lo que pueda ser útil. Ya veremos si lo consigo.

Perdona por el rollo, pero quería decirte cuales son mis sensaciones e intenciones y si quieres que sigamos juntos por este nuevo camino, aquí estaré.


Compartir esta publicacion