Marca Personal, Poder e Influencia
Quizás sea la cercanía al final de año, pero en los últimos tiempos estoy dándole vueltas a nuevos enfoques y líneas de investigación para el concepto de Marca Personal.
Percepciones, Influencia, Atracción, Poder… Hay algunas variables que pueden estar relacionadas con el desarrollo y aplicación del Personal Branding.
Las marcas comerciales están pensadas para convencer, influir y hacer que la gente levante el culo. No te ponen una pistola en la sien. Con las Marcas Personales ocurre algo parecido. Deben conseguir que te muevas utilizando la persuasión.
Cada día estoy más convencido de que las Marcas Personales convencen, no imponen. Ghandi, Mandela o Luther King utilizaron su influencia, objetivos y valores para cambiar las cosas. No impusieron nada.
Quienes no tienen esa capacidad utilizan el poder y la fuerza. Según mi propio razonamiento podríais decirme que Hitler, Stalin, Mao o incluso Chavez tendrían una Marca Personal porque pudieron influir en sus seguidores.
Sin embargo, creo que ahí falla una premisa y es que llegaron al poder en un momento en el que los valores estaban excepcionalmente alterados y cuando se dieron cuenta era demasiado tarde.
Lo que les convirtió en líderes totalitarios no fue su capacidad o su talento sino las circunstancias. Eran las personas erroneas en el momento apropiado. En realidad todos ellos eran personas bastante mediocres. La influencia dio paso al PODER.
Creo que en la empresa hay mucho poder y poca influencia. Se sigue utilizando la amenaza, aunque sea con guante de seda, en lugar de la persuasión. Quizás deba ser así, no lo se.
Un alto directivo con Marca Personal debería seguir siendo INFLUYENTE al abandonar una compañía. Sin embargo, son numerosas las historias que nos hablan de altos ejecutivos que dejaron de recibir palmaditas en la espalda y llamadas de amigos en cuanto salieron por la puerta. Porque su fuerza era el poder que le proporcionaba el puesto y no la influencia que ellos mismos pudiesen generar.
Cuando yo era jefe de producto sabía que mi fuerza para conseguir el último céntimo de ahorro estaba en la compañía que tenía detrás. Pero siempre trataba de encontrar otro tipo de vías más relacionadas con la influencia que con el puñetazo en la mesa.
En los partidos políticos ocurre igual. La habilidad de los políticos está en detectar los valores predominantes en un determinado momento. Por eso basan sus programas en encuestas en lugar de seguir sus principios.
Una persona que cometa abusos contra su pareja o contra un empleado, está utilizando el PODER porque no es capaz de generar confianza o de convencer a la otra parte. Su Marca Personal no existe. No tienen marca, prefieren dejarla en la piel de los otros u otras.
Cuando uno de esos francotiradores que han aparecido en las últimas semanas trata de conseguir notoriedad disparando en un instituto o en un centro comercial es porque se siente incapaz de ser conocido, reconocido y respetado por otros medios.
Cuando en la sociedad se anula a las personas y se las convierte en instrumentos de consumo, dejan de pensar por si mismas, prescinden de desarrollar una Marca Propia y cuando desean algo solo les queda una opción, la FUERZA, EL PODER POR EL PODER.
