Podemos teorizar todo lo que queramos sobre la Marca Personal, sobre el autoconocimiento, el análisis de fortalezas o la creación de la propuesta de valor. Todo eso y muchas más cosas son importantes y necesarias para posicionarnos como deseamos, pero si no pasamos de las musas al teatro, es imposible que dejemos huella. Una Marca Personal sólo se deja cuando actuamos, cuando generamos experiencias en los demás. En el momento
Hace unos días tuve que ir al Centro de Salud por un pequeño problema. Afortunadamente no suelo hacer apenas visitas por temas de salud, pero conozco a mi médico porque además es vecino del sitio en el que vivo y me lo suelo cruzar con frecuencia. No es una persona muy habladora. Es seria, pero no la considero antipática. Dice y pregunta lo que corresponde y, lo más importante, en
Hay un viejo chiste que dice, «¿Cómo sabes que un político miente? Porque mueve los labios». Creo que a estas alturas estamos ya bastante cansados de la palabrería de los políticos. De que prometan el cielo y no hagan nada o algo peor, que hagan justo lo contrario. No me gusta hablar de la Marca Personal de los políticos porque esta se basa en la autenticidad y lo que vemos