Post para padres: ¿Calamardo o Bob Esponja?

La mayor parte de las series de televisión y de dibujos animados de éxito tienen unos personajes bien definidos, con un posicionamiento y una Marca Personal muy clara. Los más conocidos llegan a convertirse en estereotipos.
Cuanto más claros dejen sus valores y objetivos, mejor nos identificaremos con ellos o, en caso contrario, mejor podremos odiarles sin problema.

Una de las series de dibujos de los últimos tiempos que más «chicha» tiene es Bob Esponja. En algún lugar he escuchado que esta serie fue concebida inicialmente para adultos. Pero da lo mismo, si «lees» entre lineas verás que tiene algunos mensajes que van directos a la linea de flotación de muchas de nuestras convenciones asumidas. Hay algunos diálogos que te hacen pensar y reir al mismo tiempo. Es algo así como un Dilbert para críos.

Bob Esponja es un profesional que ama su trabajo. Su vida no tiene sentido si, por alguna razón, debe dejar su empleo. Incluso las vacaciones son un suplicio para él. Para Bob, su espátula es el equivalente a la Blackberry o el iPhone de muchos de los profesionales que conozco. Una perdida o una rotura, es uno de los mayores disgustos que se puede llevar.

Ahora que, a falta de mejores condiciones en el empleo, nos tratan de venden eso de La felicidad en el trabajo, propongo a Bob como santo patrón.


Pero a Bob nos lo presentan como un ingenuo, un idealista, un  ¿Bobo?. Es un candidato idóneo para los escritores de autoayuda. La foto que adjunto pertenece a un capítulo en el que dice que «todo está en la Imaginaciooooooon (mientras traza un arco iris con sus manos)». Trata de demostrar a Calamardo que todo está en tu mente, que con una simple caja de cartón, puedes ser feliz. ¿No os suena todo esto?

Bob Esponja es el profesional comprometido con el que sueñan los de R2H2. Un individuo que daría la vida por su empresa sin pedir nada a cambio. Una persona que ni quiere ni puede ver más allá de lo que ha hecho toda su vida. Es de esos que te mirarían con desprecio si se te ocurre decir que hay vida más allá de la empresa. En lo profesional, Bob Esponja no tiene marca propia, su Marca Personal es la de su empresa. Su mayor objetivo vital es aparecer en el cuadro de honor de la organización. El problema de Bob Esponja es que para él, su vida es su trabajo y viceversa. Y si un día deja de estar en nómina (nominado), si tiene que hacer la cola del INEM en Fondo de Bikini, posiblemente se hunda.

Calamardo Tentáculos es un profesional quemado. Para él, su trabajo como cajero de El crustaceo crujiente es solo una forma de ir tirando. Es un trabajo alimenticio. Calamardo si tiene sueños, intereses elevados. Quiere una vida mejor. Le hubiese gustado ser un buen clarinetista. Sin embargo, ha tirado la toalla. Le repatea ver cómo Bob puede ser feliz en un trabajo de mierda como el suyo.

Conozco a muchos profesionales así. Personas que dejaron de luchar muy pronto. Gente que a los 35 ya se considera acabada y que a los 45 ya está esperando que le jubilen. El problema es que no es cierto ni lo primero ni lo segundo. Nadie está a acabado ni a los 35, ni a los 55, ni a los 85. Pero tampoco va a jubilarse nadie en una empresa.

Calamardo tiene los objetivos y la visión para diseñar una estrategia de Marca Personal. Pero no tiene motivaciones, tiene motivos para ponerse en marcha. Y los motivos (estar descontento u odiar tu trabajo) no son buenos impulsores.

El Señor Cangrejo es el empresario, el estereotipo de patrón que es capaz de todo por el dinero. Es el único que ha tenido claro lo que quería hacer y se ha puesto en marcha para conseguirlo. Posiblemente es una de las Marcas Personales más claras. Tiene un objetivo, tiene unos valores o prioridades y hace lo que, en su opinión, hay que hacer. En el fondo no es mala persona, pero a la hora de tomar una decisión, lo tiene claro. Y eso genera confianza y credibilidad. Aunque no te guste lo que haga.

Arenita es practicamente el único personaje femenino protagonista en la serie. Es una ardilla científica que vive en una especie de base submarina. Supongo que es lógico que sea una «mujer» la que represente la sensatez.

Este es solo un post para desengrasar, pero espero que los padres y madres hayaís visto cosas como estas o empezaré a pensar que soy incapaz de desconectar de mi trabajo, como Bob Esponja. ;-)

ACTUALIZACIÓN:

En el post original no cité a Patricio porque todo indica que está fuera del mercado laboral, seguramente está recibiendo algún subsidio. Es el Ni-Ni de la serie. Quizás se deba a una discapacidad que le impide realizar cualquier trabajo intelectual que requiera concentración. Vive en una solución habitacional en unas condiciones más precarias que el resto de protagonistas, pero parece que la falta de reconocimiento no le impide ser tremendamente feliz.





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