Los elementos de tu Oferta Personal


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Hace ya muchos meses que tengo la sensación de que mucha gente en dospuntocerolandia en particular y en el mundo en general están obsesionados por ser «conocidos», ganar seguidores o tratar de convertirse en eso tan ridículo que llaman «influencer».

Es como si todo en esta vida consistiese en llamar la atención a toda costa, en hacer extravagancias cada día más desquiciadas para conseguir un puñado de seguidores.

Una cosa que me jode de esa tendencia es que algunos recién llegados a esto del Branding Personal, consideran que un tipo (o tipa) que grita y que hace muchos gestos en su canal de YouTube (con muchos colorines y efectos) es alguien que deja una Marca Personal profunda.

Sin embargo, parece que se suele olvidar que una marca, personal o comercial, existe si hay un producto, propuesta o servicio que la soporte. NIKE, IKEA o Mercadona son marcas potentes porque detrás hay productos o servicios.

Perez-Reverte, Zidane o Taylor Swift son, en primer lugar grandes profesionales en lo suyo, y como consecuencia y, cada cual con su propio estilo (que te podrá gustar o no), van dejando huella. Ahí está el mérito, la dificultad y el trabajo.

Ser noticia por algún escándalo es relativamente sencillo… y también volátil. Hoy uno de esos aspirantes a cantantes «low cost» que abundan en los «realitys» tipo OT va a tener unas cuantas horas de ¿gloria? por dar una opinión política o por montar un numerito. Como te digo, eso es sencillo y también fugaz.

Lo jodido es ser Dalí, Placido Domingo, Berlanga o Joaquín Sabina. Cuando tienes algo realmente útil, bueno y consistente en el tiempo, puedes permitirte algunas licencias. Pero si te quedas con la extravagancia de Dalí sin tener ni un ápice de su talento, entonces no dejas huella, simplemente eres patético.

Ya sé que este discurso es inútil, incluso puede estar mal visto por algunos en nuestra cultura Instagramesca pero, que le vamos a hacer.

Por si acaso, por si todavía queda alguien ahí que piense que, si quieres generar un cambio, debes tener algo que ofrecer y no sólo montar un numerito cada cinco minutos, te doy algunas pautas sobre la forma en que yo creo que hay definir una oferta profesional.

Denominación. ¿Cómo se llama tu profesión?

Aunque no es lo más importante, es conveniente poner un nombre a lo que haces. Ojo, no me refiero a esa manía actual de inventarte denominaciones chorras o llamativas (volvemos a lo de antes) sino simplemente a conectar quién eres con lo que haces. Más que nada porque si no lo pones facilito, mucha gente no va a pensar en ti cuando alguien necesite a un profesional de «lo tuyo».

Hay un aspecto a tener en cuenta y es que si te vinculas a una profesión (consultor, fontanero, cocinero, «personal brander»,…) y esta cae en desgracia, es posible que te arrastre. Por ejemplo, empieza a dar la sensación de que hay más expertos en Marca Personal que personas, así que, muy probablemente el concepto va a degradarse en breve si no lo ha hecho ya.

Así que, más que obsesionarte por el nombre piensa en los elementos siguientes.

Materia. ¿Con qué “materia prima” creas valor?

Ideas, felicidad, creencias, ladrillos, programas, conocimientos, dinero, problemas, productos, salud, seguridad,…

Todos trabajamos con algo. Pero quizás no lo tenemos claro. Por ejemplo, cuando trabajo con coaches, suelen decirme que su «materia prima» son las personas cuando no es así. Su material son las creencias, ideas, emociones,…

Posiblemente la materia prima de Disney no son las películas sino las emociones. Y así con todo.

Para mí este es uno de los elementos más difíciles de definir en tu diseño de propuesta de valor.

Actividad. ¿Qué actividades realizas?

Producir, vender, manejar, apoyar, importar, descubrir, conectar, negociar, diseñar, construir,…


Lo siguiente que debes tener claro es qué haces con esa materia prima. Pero ojo, la respuesta que des a eso, lo cambia todo.

Por ejemplo. Supongamos que trabajas con champú. Si lo vendes eres comercial, si lo fabricas eres responsable de producción y si lo utilizas puedes ser peluquero.

Debes tener claro en qué consiste tu trabajo. Cuando te hagan una entrevista de trabajo, pretendas justificar tu puesto o esperas que alguien te contrate, esto lo debes tener clarísimo.

Demanda. ¿Qué problemas resuelves? ¿Qué mejoras consigues?

Si tienes claro con qué trabajas y qué haces con ello, lo siguiente que debes definir es el resultado que vas a producir o el beneficio que vas a generar.

Cuando pregunto a mis alumnos, ¿y tu que vendes? siempre hay alguien que dice, «soluciono problemas». Ya pero, como diría Eugenio, ¿hay alguien más?

Básicamente la gente te contrata/paga/elige por dos razones. O están jodidos y necesitan resolver un problema. O están bien pero quieren estar mejor.

Así que, a estas alturas del partido debes tener muy claro cual es el efecto concreto (aumentar lo bueno, reducir lo malo) de lo que ofreces. Y si lo cuantificas, ya es la leche.

Valor. ¿Qué valor aportas?

Esto me lo habrás escuchado o leído más de una vez pero, el resultado final de aplicar el punto anterior se reduce a tres cosas: Tiempo, Dinero o Bienestar.

Cualquier cosa por la que esperas que te paguen debe poder explicarse en forma de Euros, horas/días/años o Felicidad, tranquilidad o eliminación de sufrimiento. Y si lo piensas bien, esto sirve para un consultor, para un iPhone o para una botella de agua mineral. Piénsalo un poco

Formato. ¿En qué formato vendes tu trabajo?

Llegados a este punto, lo que te queda por decidir es como vas a «empaquetar» tu producto.

¿Vas a ir todos los días a una oficina o fábrica? ¿Vas a crear un modelo franquiciable? ¿Vas a crear cursos presenciales o virtuales? ¿Vas a hacer asesorías por Skype?

De todo esto hablo con más detalle en Monetízate, pero creo que con estas ideas ya tienes algo en lo que pensar.

Como te digo, tienes dos opciones, o te empeñas en llamar la atención porque no tienes nada que ofrecer o te ganas tu prestigio creando algo valioso y generando confianza. ¿Que lo segundo es más lento y trabajoso? Pues claro, pero también mucho más duradero y profundo.

NOTA:

El día 15 de Mayo estaré en mi querida ciudad de Alicante presentando mi libro Monetízate con dos tipos estupendos y muy generosos, Juan Carlos Cubeiro y Nico Castro. Será en Puerta Ferrisa (C/Jorge Juan, 21) a las 19:00 y con el respaldo de mi amiga Cristina Mulero, Guzmán Martinez y la gente de Brandty.

Lo que me gusta de estas cosas es que es una excusa estupenda para conocer a gente interesante y desvirtualizar amigos. Así que, nos vemos allí.

Como esta semana no he publicado el martes, aquí tenéis el vídeo de Street Personal Branding en el que hablamos de algunas cuestiones de las que se suele hablar poco cuando quieres desarrollar tus propios proyectos paralelos como profesional libre.





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